El conocimiento de nuestro Yo nos permite adaptarnos a las situaciones cambiantes y resolver los conflictos que se nos presentan de la mejor manera. El Yo es, en definitiva, lo que nos hace ser quienes somos.
Lo anterior me hace tener un sentido de valoración de mí mismo que fortalece mi percepción del Yo. Esta percepción me aporta autoestima, y ello influye en mi personalidad, en mi comportamiento y en mi bienestar. Una alta autoestima se relaciona con tener una actitud positiva hacia mi Yo. Ello me hace aceptar mis fortalezas y debilidades, confiar en mis capacidades y sentirme satisfecho con mi vida.
El crecimiento personal es un concepto en evolución, que va cambiando a lo largo de nuestra vida, según las circunstancias, los aprendizajes y las experiencias vividas. Todo esto nos influencia.
Se encontrará en su contenido temas que sugieren cómo pasar a la acción y transformarse, haciendo referencia a elementos que se pueden llevar a cabo a través de ir tomando conciencia de uno mismo, impulsando el desarrollo de los propios potenciales por medio del autoconocimiento, la autoaceptación y la automotivación.
El libro es una invitación a reflexionar a través de su lectura sobre la importancia de vivir, explorando temas como el sentido de la vida y su contenido, y en última instancia nos desafía a aplicar nuestros valores y principios de una manera más enriquecedora a lo largo de nuestra vida.