La Tierra, nuestra casa en el espacio, navega entre el caos y el equilibrio, capitaneada por insensatos y poderosos patronos, desprovistos de toda lógica y razón, navegantes ávidos e insaciables, diezman sus preciados recursos, destruyen cuando no, las cuadernas, la arboladura de la nave, o los instrumentos y útiles de navegación
Las agresiones al medio, los impactos ambientales, la contaminación creciente e incontrolada, los riesgos nucleares, las guerras, el reparto de los recursos, el exacerbado consumo, la extrema pobreza, las hambrunas, las pandemias, los enfrentamientos culturales, los desencuentros entre credos, sin olvidar las luchas sociales y los desafíos económicos, representan el escenario que se vive en cubierta.
Este viaje sin rumbo, a alta velocidad de crucero, convierten la manejabilidad de la nave, en una travesía de alto riesgo para todas las especies del planeta, incluida la nuestra. Así las cosas, parece que nada ni nadie, sea capaz de poner orden, en la rebelión que se vive a bordo.