Los sucesos que se relatan en esta obra están relacionados directamente con un desgraciado hecho de la Historia Naval de España, la Batalla de Trafalgar (1805). En concreto, se describe la situación que sufrieron los prisioneros de los restos de la escuadra naval francesa participante en ese combate naval, fondeada en aguas de la Bahía de Cádiz, en el marco de la Guerra de la Independencia de España.
Después de soportar el bloqueo inglés desde octubre de 1805 hasta junio de 1808, rota la coalición franco-española y rendida la pequeña flota imperial napoleónica al mando del vicealmirante Rosily por la Armada española, comenzó para estos marinos un largo período de reclusión, en el que 3.676 hombres fueron hacinados en los llamados pontones; viejos navíos de línea habilitados como cárceles flotantes que fueron anclados en la rada gaditana. A ellos, pronto se les unirían los 17.350 hombres del general Dupont capturados en la victoriosa Batalla de Bailen. Muchos de ellos compartirían su suerte, a bordo de los nominados por algunos sepulcros flotantes.
En esta segunda edición se desvela, gracias a la cartografía histórica francesa localizada, el posicionamiento de los pontones en la Bahía de Cádiz.
Algunos supervivientes, al retornar a su país, nos dejaron el testimonio de sus memorias, recogiendo en ellas todo lo acontecido durante su cautiverio; una historia de muerte y tristeza, pero también salpicada de momentos lúdicos, donde cobran importancia los juegos, el teatro y la música. Estos hechos históricos se materializaron incluso en una desconocida ópera cómica Les Pontons de Cadix, estrenada en Paris en 1836, de la cual se aporta el libreto, y en la que participó como interprete solista, con solo 9 años, la joven virtuosa del violín Teresa Milanollo.
Este libro rescata unos hechos que durante demasiado tiempo han sido relegados por la Historiografía española. Era obligado en el Bicentenario de las Cortes de Cádiz y del período de la Guerra de la Independencia de España dedicar una investigación al tema, dándole el énfasis necesario al lado más humano de la Historia.
Creemos importante RECORDAR ESTE OLVIDO
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En particulier, on décrit la situation subie par les prisonniers des restes de l’escadre navale français dans les eaux de la baie de Cadix et pendant la Guerre de l’indépendance de l’Espagne.
Après avoir supporté les blocus anglais depuis octobre 1805, jusqu’au mois de juin 1808, brisé la Coalition Franco et rendu la petite flotte impériale français sous le commandement du vice-amiral Rosily par la marine espagnole, commence pour ces matelots une longue période de réclusion, dont 3676 hommes sont entassaient dans les pontons ; vieux vaisseaux de ligne habilités comme prisons flottantes qui sont ancrés au milieu de la baie de Cadix.
Pour eux, ils joignent bientôt 17.350 hommes du général Dupont capturés à la bataille de Bailen. Beaucoup d’entre eux partagent leur destin, à bord des nominés, par certaines, les sépulcres flottants.
Certains survivants au retour á son pays, nous laisse le témoignage de ses mémoires, dans lesquelles ils racontent ce qu´est passé pendant sa captivité ; une histoire de mort et tristesse mais aussi parsemée de moments ludiques, comme des jeux, de théâtre et de la musique. Ces faits historiques sont reflété même à un inconnu opéra comique Les pontons Cadix, créée à Paris en 1836. Le livret est fourni aussi.
Ce livre sauve quelques faits qui ont été longtemps reléguées par l’historiographie espagnole. C´était une obligation t à l’occasion du bicentenaire de la Cortes de Cadix et la période de la Guerra de l’indépendance de l’Espagne consacrer des recherches sur le sujet, lui donnant l’accent nécessaire sur le côté plus humaine de l´histoire.
Nous croyions que c’est important n’oubliez pas cet oubli.
