Recuerdos de una infancia. Nada más comenzar, ya se advierte al lector de que «la memoria es quebradiza y acomodable».
Quizá por esa convicción personal, este libro está dividido en capítulos que se refieren a pequeños retazos de una vida. Retazos que, mejor o peor explicados, se tratan independientes unos de otros y libres de cadenas cronológicas.
En general, todos ellos con un trasfondo alegre y optimista. Como la infancia misma.
«La infancia es nuestra primera vez de casi todo».