¿Hasta qué punto puede ser dura la infancia? ¿Hasta cuándo puede determinar el propio futuro? ¿Cuántos infiernos hay que cruzar para encontrar la paz necesaria y volver a sonreír? ¿Acaso es necesario emigrar a los confines del mundo para encontrar la confianza, la tranquilidad, la amistad, el respeto y el amor? En Resueños, Pariente aborda su infancia a modo de purificación del alma. En cada poema, y con un lenguaje lleno de plasticidad y plagado de potentes y sugeridoras imágenes, deja correr sus recuerdos con la única intención de hacer las paces con su pasado y no volver a mirar atrás. Es un ejercicio de aceptación para disipar el dolor y la desesperanza de una infancia marcada por la guerra y la extrema pobreza. Pariente habla de sí mismo,
pero también de aquellos que ya no están, de aquellos que, frente a sus ojos de niño, sucumbieron, casi fatalmente, a la adversidad. Con este poemario, Pariente quiere dejar todo listo para levantar el vuelo hacia la auténtica belleza de la vida, un lugar que merece ser explorado con el alma limpia y el corazón renovado.