“No hagas el ridículo tomando a los vampiros por monstruos imaginarios o por invenciones del ego mórbido de escritores y cineastas. No hay vampiros, pero de existir existen, seguro. Todo el mundo conoce a un vampiro, incluso a más de uno; también hay vampiras, por descontado; puede que de éstas haya más todavía.
Piensa en ello un segundo… ¡seguro que ya lo tienes!
En este libro hay humanos y hay vampiros, todos ellos tan crueles y sanguinarios como listos y eficaces. Y todos ellos auténticos.
Un reguero de pólvora es eso: una sal, azufre y carbón, o sea: nada. Nada, hasta que se prende con una cerilla.
En tus manos tienes el libro; dentro de ti está la cerilla.”
P.Blasco / J. Guitart
Juan Lynch guarda celosamente un secreto. Es un asesino profesional. Vive en Barcelona, con las siete mujeres de su familia. Una de ellas, su hija Sabrina, consigue con artimañas de adolescente acompañarle a Jordania, ignorando los verdaderos motivos del aparente “viaje de negocios” de su padre. Es en este país donde el sicario debe realizar el último y sorprendente encargo que ha recibido de una secular y poderosa institución internacional: DEBE MATAR A UN VAMPIRO.
Una vez en su destino, el encuentro casual con una serie de personas aparentemente desvinculadas entre si, irá tejiendo una intrincada trama en la que cada vez se encontrará más atrapado. Lo que en un principio parecía tan solo un trabajo difícil, se convertirá en una frenética carrera por el desierto, ciudades, aldeas y diversas embajadas, tras un objetivo cada vez más terrible, en el que peligra su propia vida y lo que es aún mucho peor: la de su hija.
Cazador y presa al mismo tiempo, Lynch deberá utilizar todos los recursos que su oficio, su cinismo y su falta de moral le proporcionan si quiere vencer los macabros peligros que le acosan.