La vida te ofrece oportunidades imperfectas, te hace cuestiones sin respuesta y al final, cuando ya te has jugado la vida, bailas con esa desconocida soledad que has pasado toda una muerte buscando.
Nuestros secretos nunca estuvieron a salvo y sin ser esta sinopsis algo típico, afirmo que en vuestras pupilas, nuestro libro, guardará toda la magia que un día derrochamos mientras discutíamos con el suelo.
El amor, el silencio, un cuerpo, la prisa, el tiempo o sencillamente una sonrisa. Todo está ahí, en esa esquina donde el corazón usa a la palabra de alimento y los sueños, sin permiso de nadie, se hacen realidad.
Quizás los minutos no tienen nombre, quizás este libro no lleve el título de una vida pero quiere jugar a ser la de todos.
Si los coches hablaran nos daríamos cuenta de que nunca estuvimos solos.
“Un libro actual, sensible a las preocupaciones de los ciudadanos, lleno de aciertos y hallazgos que conmoverán al lector por su tono lírico y evocador a la vez que directo y comprometido.”
Fernando Valverde
“Hablar de la crisis, de la economía o el capitalismo. Incluso tocar temas todavía tabúes en muchos lugares como la muerte o el suicidio… pero hacerlo con suficiente arte para conseguir que el lector vea el punto de luz al final para seguir leyendo sin parar.”
Pau Garcia-Milà
“Si los coches hablaran es una ventana abierta al mar: al de la utopía y al Mediterráneo. Es lo que la resaca deja en la arena cuando las palabras salen a pescar y se encuentran con los ojos de Simón.”
Beatriz Talegón