Este libro recoge toda una serie de vocablos de origen catalán, la mayoría de los cuales se utilizan actualmente en el habla del Bajo Segura. Buena parte de ellos ya aparecieron en la primera edición, por lo que esta es en realidad una actualización y también una ampliación de aquella.
El motivo de la existencia de este sustrato en el Bajo Segura es debido a que, tras la expulsión de los musulmanes y la fundación del Reino de Valencia, la repoblación se hizo mayoritariamente con personas venidas de Catalunya, cuya lengua era el catalán.
Debido a diferentes circunstancias históricas, a partir de mediados del siglo XVIII, el habla que impera en el Bajo Segura es el castellano, al menos por escrito y de manera oficial, pero es con toda probabilidad que a nivel hablado, especialmente en ambientes familiares y rurales, el uso del valenciano (catalán) se prolongara mucho más tiempo, al menos hasta finales del siglo XVIII como se demuestra con el documento del Archivo Histórico de Orihuela, citado en este libro. Probablemente también se hablara a lo largo de buena parte del siglo XIX. Es por todo ello que en el castellano hablado en el Bajo Segura (valentellano, mezcla de valenciano y castellano) exista, a pesar de tantos obstáculos oficiales, gran cantidad de vocablos de la lengua catalana, cuyo sustrato es el eje en torno al cual gira toda la investigación.
Su autor, Alberto Soto López, ha realizado innumerables incursiones por todos los rincones de la comarca para hablar con sus gentes y ha intentado reflejar el buen estado en el que se encuentra el sustrato catalán en la actualidad.