La troquelería es la profesión más atípica y olvidada de la industria, pues para ejercerla se necesitan de amplios conocimientos de la chapa, de los hierros y aceros, de las fundiciones, de los diseños, CAD y CAM, de programas y mecanizados, de puestas a punto en las prensas y de cómo dominar la chapa para que las piezas troque-ladas formen los automóviles y electrodomésticos. Lo más curioso de la profesión troquelera es que para poder ejercerla se necesitan muchos conocimientos y se da la paradoja de que no hay ningún lugar en el que los conocimientos de troquelería se puedan enseñar, ni libros en los que consultar y aprender ni profesores que los enseñen. Los profesionales que forman la troquelería han aprendido la profesión en la universidad de la vida, leyendo en el libro titulado De boca a oreja, lo que justifica que la troquelería genera cero rendimientos económicos y cuestionable calidad. Esta es la razón que justifica el libro Troquelería moderna. Con el libro solo pretendo que algo se mueva, que los dormidos despierten y, lo más importante, que por falta de conocimientos no se deje morir una profesión tan vital para la economía, que no muera por ignorancia.t