«Es curioso como las distancias son, en realidad, relativas al tiempo que tardamos en recorrerlas. A veces, las distancias son puramente físicas; otras, mentales. Pero todas sus longitudes vienen convenidas en relación al tiempo que toma ir desde su comienzo hasta su final. […]. Sin embargo, otras distancias, no importa cuán rápido pudieren llegar a ser nuestros medios de locomoción, aún seguirían llevándose toda una vida en ser recorridas».
¿Serías capaz de dejarlo todo por perseguir el último recuerdo feliz que tuviste? ¿Qué sería lo peor que podría pasarnos al ir en su búsqueda? Acompaña a Arturo en este viaje físico y metafórico que es Un final para su final para averiguarlo. Quizás, junto a él, decidas que este haya de ser el punto de partida de tu propio viaje, en el que comiences a ir tras tus sueños antes de que no sean más que pálidos recuerdos…
«Habitamos una sala de espera en la que se nos fuerza a la supervivencia y se nos reprocha anestesiarnos para hacer del paso del tiempo algo más llevadero. No hay planeta en donde la vida se desarrolle bajo condiciones tan extremas».