Pola de Siero, mediados de 2010. Una llegada al instituto hace ver que puede ser un
escaparate para labrarse una buena vida social rodeado de gente de su edad en un ambiente distinto al que había vivido antes y así es como todo comienza. Por desgracia, Pelayo comenzaría a sufrir la cara más amarga de la vida y lo peor que puede dar de sí el ser humano, llegando hasta niveles que nadie se podría llegar a imaginar. Un thriller psicológico donde la empatía, el miedo y la toma de decisiones son un hilo conductor para que el lector pueda conocer de primera mano el cambio evolutivo en una persona,
tanto física como psicológica, en el momento antes, durante y después de haberlo sufrido. Todo es real, no hay nada que sea fruto de la ciencia ficción, por lo que las lágrimas del redactor pueden ser palpables en los momentos más tensos y donde el corazón se te encoge sin darte cuenta.