Mariu Sánchez, de raíces asturianas, se declaró ciudadana del mundo desde mucho antes de saber de la existencia de fronteras que lo fragmentaban. Inconformista, inquieta, soñadora, aventurera, y una buscadora nata desde que no levantaba más de un palmo del suelo, tuvo claro desde niña que un día recorrería el mundo entero para encontrar su propia verdad, que siempre supo que sería diferente a las verdades oficiales sin matices.
«A mí que no me lo cuenten», decía siempre para sí. Y antes de darle tiempo a nadie para que se lo contase, dio un golpe sobre la mesa, saltó al vacío sin red y se lanzó al mundo en un acto valiente lleno de amor por la vida, persiguiendo como norte su anhelada libertad. Destino Libertad es la crónica de ese enorme sueño y de todas las pruebas iniciáticas que la vida le puso en su búsqueda infatigable.