El Barlovento es una historia que sabe a sal. Samuel tiene catorce años y es hijo de marino. Una saga que se origina en 1780. En el viejo caserón paterno de Baiona encuentra un libro que recoge las aventuras de su ancestro. Su antepasado, también llamado Samuel, se enrola como grumete en un viejo galeón, llamado El Barlovento. Durante una gran tempestad, naufragan, muriendo todos excepto Samuel, que es rescatado por el navío El Holandés Errante, que lo transporta a los mismos infiernos. Consigue huir y llega a una solitaria y hermosa isla. Un día, un temible pirata, de apodo Black Heart, desembarca y entierra un fabuloso tesoro. Samuel es testigo de aquel hecho.
Después de innumerables peripecias, consigue regresar a casa. Pasados los años, regresa y encuentra sin dificultad el inmenso tesoro. Se lleva la mitad y deja el resto para aquel predecesor que lo merezca.